Em descobreixo sensible, però sóc trapella i molt, molt inquieta.

També sóc creativa, generosa i divertida... vaja... i que no ho som tots? Això sí, diuen de mi que sóc tossuda, però jo prefereixo dir-ne tenaç. Sóc aquella, la que seu a la tercera fila, la del barret al cap i les plomes al voltant del coll...






jueves, 1 de agosto de 2013

ESPECIAL FESTIVAL GREC 2013: SEGUIMOS SABOREANDO PROPUESTAS


Publicada en El Club Express


Julio 2013  |  Festival Grec, Artes Escénicas, Barcelona
Es un gustazo que una semana más podamos seguir analizando para vosotros algunos de los espectáculos que han pasado este año por el Festival Grec de Barcelona. Una función tras otra – ¡a veces literalmente!- y seguimos en la brecha sin desfallecer. Nos emocionamos y vibramos, reflexionamos, reímos y lloramos, porque el teatro, la danza, las artes no son sólo mero entretenimiento. El arte conmueve, emociona, forma personas, muestra realidades, suscribe sueños y se transmite de generación en generación. La cultura nos da conocimiento y nos ayuda en el discernimiento. ¿Por qué hay quien se obstina en no querer apostar por un futuro donde esta cultura ocupe el lugar que le corresponde? ¿Aquel lugar que es necesario potenciar, fomentar y desarrollar porque va estrechamente ligado al crecimiento y la evolución de las personas? Si recortamos la cultura, tristemente mutilamos a las personas.
Esta semana empezamos nuestro recorrido por George Kaplan de Frédéric Sonntag, en la Sala Beckett. A algunos os sonará el título de la obra. Sí, era aquel personaje inexistente en la película de Alfred Hitchcock North by Northwest (Con la muerte en los talones) por el que Gary Grant era confundido y perseguido con una avioneta en un aislado campo de trigo. Una gran escena para muchos cinéfilos.
George Kaplan son tres historias en una. ¿O quizás son tres versiones de la misma? ¿O tres momentos enlazados sin principio ni final? ¿O tres secuencias de un mundo paralelo? ¡Decididlo vosotros! La primera pieza es la reunión de un grupo de activistas clandestino cuyo objetivo es aportar cambios en el sistema cultural y mediático de occidente (¡seguro que muchos de los asistentes nos sentimos identificados!). La segunda muestra cómo un equipo de guionistas de ficción intentan elaborar un relato que ofrezca respuestas al naufragio del actual sistema de valores. Y la tercera pieza presenta un grupo de poder, un lobby a la sombra, que estudia cómo enfrentarse a una amenaza del sistema actual. El nombre de George Kaplan es el enlace de estas tres historias.
Toni Casares, director de la Sala Beckett, dirige espléndidamente a los cinco intérpretes que entran y salen de los personajes para viajar por la consigna de un nombre, para dar el protagonismo a un concepto inmaterial, etéreo. Es el lenguaje del teatro contemporáneo por el que apuesta esta sala, un lenguaje que nos estimula la mente, que nos agiliza las neuronas. Y si bien, el autor propone un arduo ejercicio de dramaturgia donde las piezas puedan a la vez superponerse y ser independientes, los actores (Sara Espígul, Borja Espinosa, Francesc Ferrer, Jordi Figueras y Sandra Monclús) son los camaleones que en su bien hacer nos facilitan entrar en ese universo de narración no lineal. Un diez a la Beckett porque sigue el impulso y la filosofía de Sanchís Sinisterra y porque sigue consolidándose como sala de referencia en la incidencia social. George Kaplan estará hasta el 28 de julio.
Televisor & Misèria de la II Transició de Albert Boronat pasó por el Teatro Romea del 18 al 20 de Julio. ¡Y es realmente una pena que sólo estuviera dos días! Pues Carme Portacelli dirige con gran acierto esta hilarante comedia que protagonizan David Bagés, Lluïsa Castell, Gabriela Flores, Albert Pérez y el músico Jordi Prats.
Cuando entramos a la sala, nos encontramos a los cuatro intérpretes en el escenario, sentados y observándonos, pero no individualmente, sino como si fuéramos un programa televisivo. El público éramos la actualidad, el presente, lo que estaba pasando en ese mismo momento, cada uno con nuestras historias y nuestras mochilas. Y éramos el retrato de la noticia que los actores estaban visionando. Televisor & Misèria de la II Transició son esbozos de vida, momentos de realidad que nos son presentados en clave de burlesca comedia. Los intérpretes, estos comediantes del siglo XXI, nos recordaban a los bufones de la Edad Media que, por un lado, con sus palabras y acciones, hacían reír y que por el otro, mostraban la realidad de la manera más descarnada. Y así ha sido, nos hemos reído a carcajadas congeladas al ver una futura sanidad, hoy ficción -¿acaso mañana realidad?-, con momentos mostrados de esta historia tan reciente, tan deteriorada.  ¿Cómo es posible vivir y sentir a la vez el dolor más duro y la risa más jocosa? Televisor & Misèria de la II Transició lo consigue. ¡Excelente trabajo!
En el Mercat deles Flors nos acercamos para asistir a La nau dels bojos (La nave de los locos), un espectáculo de Joan Yago, dirigido por Israel Solà e interpretado por la Compañía La Calòrica.
Cinco personajes grotescos, casi esperpénticos huyen de la peste y del pasado en un barco para dirigirse hacia un futuro incierto. Un arisco bufón reconvertido en capitán del navío transporta las inseguridades de una tabernera, las contradicciones de un obispo,  las meditaciones de un estudiante de literatura autoproclamado poeta y los miedos de una mujer de negro. El paso de los días les lleva a darse cuenta de que no hay lugar para ellos, que están perdidos en su propio destino.
Inspirada en el cuadro que pintó el artista neerlandés El Bosco, la compañía nos plantea una reflexión: ¿es lícito intentar avanzar, intentar modificar las cosas aun sabiendo que no existe la tierra prometida, que volveremos al mismo sitio? ¿O debemos seguir a pesar de no tener la exitosa moneda de las dos caras?
El humanista Erasmo de Rotterdam en su escrito Elogio a la locura ya nos exponía las razones por las cuales los seres humanos llevamos a la locura como compañera de viaje y porqué debe realmente ser una de nuestras mejores cualidades. Una chispa de locura es lo que nos hace progresar, lo que nos predispone a la lucha contra las debilidades, lo que nos anima a seguir ante las adversidades. La Calòrica va más allá de la interpretación y nos deja entrever, si somos audaces, nuestra propia nave, porque...¿qué sería la vida sin un mínimo de locura?
Finalmente, también en el Mercat de les Flors, le llegó el turno a la danza, aunque “danza” es una palabra que se queda corta para el espectáculo visual de Plexus. Aurélien Bory firma la concepción de esta puesta en escena interpretada por Kaori Ito. Era día de estreno y no teníamos referencias. Desde el primer minuto el impacto visual fue impresionante. Con un micrófono a gran volumen, la bailarina, repasaba los sonidos de su anatomía interior y exterior. A continuación, se sumergió en la instalación escenográfica, un bosque de hilos que modificaba el movimiento. La escenografía recordaba las instalaciones del artista plástico Cildo Meireles combinada con una performance mágica. El movimiento aprisionado por los hilos modificaba sus acciones. El público estaba sin respiración. Era una búsqueda de la memoria corporal. Nos dejamos sorprender con imágenes asombrosas, con una pieza de tejido que danzaba sola, con movimientos aéreos al más puro estilo Tigre & Dragón de Ang Lee. ¡Y no sólo nosotros! Un público agradecido ovacionó generosamente a una sonriente y frágil bailarina. Espectacular trabajo corporal. Por fin, ya podíamos respirar.
Texto: Ester Bueno (@Ester335)

No hay comentarios:

Publicar un comentario